La alopecia inducida por radioterapia suele ser irreversible, sobretodo si se han administrado dosis altas de radiación.
Podemos ayudar al crecimiento mediante el uso de tratamientos tópicos, inyecciones en cuero cabelludo, tratamientos por vía oral o incluso transplante capilar.
La alopecia producida post-quimioterapia es reversible en la mayoría de los casos.
Su duración depende del agente quimioterápico empleado y el pelo vuelve a crecer a partir de los 3-6 meses tras el último ciclo.