Trata el cáncer de piel gracias a la cirugía de Mohs

Procedimiento quirúrgico altamente preciso

La cirugía de Mohs es un procedimiento quirúrgico utilizado para el tratamiento del cáncer de piel, especialmente en áreas de la piel donde la conservación del tejido es esencial para la función o la estética. Este procedimiento quirúrgico, que se lleva a cabo bajo anestesia local, implica la eliminación de las células cancerosas de la piel una capa a la vez hasta que todas las células cancerosas han sido eliminadas. El procedimiento de Mohs es muy preciso y altamente efectivo en la eliminación del cáncer de piel, con una tasa de curación superior al 99 por ciento.

El procedimiento de Mohs lleva el nombre de su inventor, el Dr. Frederic E. Mohs, quien desarrolló la técnica en la década de 1930. El Dr. Mohs fue el primer cirujano en utilizar una técnica de extirpación de cáncer de piel en capas, que permitía una mayor precisión en la eliminación del cáncer de piel y la conservación del tejido sano. Desde entonces, la técnica se ha mejorado y refinado, y se ha convertido en una opción popular para el tratamiento del cáncer de piel.

La cirugía de Mohs es un procedimiento ambulatorio que se realiza en la clínica del dermatólogo o en el consultorio del cirujano. Se lleva a cabo bajo anestesia local, por lo que el paciente está despierto durante todo el procedimiento. El procedimiento comienza con la eliminación de una pequeña porción del cáncer de piel. Esta porción se analiza inmediatamente en el laboratorio, y si se detectan células cancerosas, se procede a la eliminación de otra capa de piel. Este proceso continúa hasta que todas las células cancerosas han sido eliminadas.

Ventajas de la cirugía de Mohs para el tratamiento del cáncer de piel

Una de las principales ventajas de la cirugía de Mohs es que permite la conservación del tejido sano. En lugar de eliminar grandes secciones de piel, la cirugía de Mohs elimina el cáncer de piel en capas delgadas, lo que reduce la cantidad de tejido sano que se elimina. Esto es especialmente importante en áreas donde la función o la estética son críticas, como la cara, las orejas y las manos.

Elevado porcentaje de curación del cáncer

Otra ventaja importante de la cirugía de Mohs es su alta tasa de curación. La técnica de Mohs es altamente precisa y efectiva en la eliminación del cáncer de piel. Según la Academia Americana de Dermatología, la tasa de curación para el cáncer de piel tratado con la técnica de Mohs es superior al 99 por ciento. Esto significa que la mayoría de los pacientes que se someten a la cirugía de Mohs no experimentan una recurrencia del cáncer de piel.

Además de su alta tasa de curación y su capacidad para conservar el tejido sano, la cirugía de Mohs también es un procedimiento relativamente rápido y sencillo. Aunque el procedimiento puede tardar varias horas, la mayoría de los pacientes pueden volver a sus actividades normales en unos pocos días.

Aunque la cirugía de Mohs es un procedimiento altamente efectivo para el tratamiento del cáncer de piel, no es adecuada para todos los pacientes. En general, la cirugía de Mohs se recomienda para pacientes con cáncer de piel en áreas críticas como la cara, las orejas, las manos o los pies, o para aquellos que tienen cánceres de piel que se han propagado o son recurrentes. También puede ser adecuada para pacientes con cánceres de piel grandes o agresivos.

El procedimiento de Mohs también puede ser utilizado para tratar ciertos tipos de cáncer de piel, como el carcinoma basocelular y el carcinoma de células escamosas. Estos tipos de cáncer de piel son los más comunes y generalmente son tratables con cirugía de Mohs.

Aunque la cirugía de Mohs es un procedimiento altamente efectivo y seguro, como cualquier procedimiento quirúrgico, existen algunos riesgos y complicaciones asociados. Estos pueden incluir infección, sangrado, dolor, hinchazón y cicatrices. Sin embargo, estos riesgos son generalmente bajos y pueden ser minimizados siguiendo las instrucciones postoperatorias de los médicos especialistas de las Clínica Dermatológica Internacional.

Otra ventaja de la cirugía de Mohs es que es un procedimiento personalizado. Cada paciente es tratado de manera única, lo que permite al cirujano adaptar el procedimiento a las necesidades individuales del paciente. Por ejemplo, si el cáncer de piel se encuentra en una ubicación especialmente difícil de tratar, el cirujano puede ajustar el procedimiento para asegurarse de que se eliminen todas las células cancerosas sin comprometer la funcionalidad o la estética de la zona.

Además, la cirugía de Mohs se ha demostrado ser efectiva en el tratamiento de cánceres de piel recurrentes. Incluso si el paciente ha sido tratado previamente con otros métodos, como la radiación, la cirugía de Mohs puede ser una opción viable.

Es importante tener en cuenta que, aunque la cirugía de Mohs es altamente efectiva en la eliminación del cáncer de piel, no es un sustituto de la prevención y el diagnóstico temprano. La prevención del cáncer de piel implica limitar la exposición al sol, usar protector solar y proteger la piel con ropa adecuada. El diagnóstico temprano del cáncer de piel es crucial para aumentar la tasa de curación y reducir el riesgo de complicaciones. Por lo tanto, es importante que los pacientes se sometan a exámenes regulares de la piel y consulten a un dermatólogo de la Clínica Dermatológica Internacional si notan algún cambio en su piel.